Parque de las maravillas australianas donde te sientes como si estuvieras en un cuento de hadas
Australia es un país y continente aislado del resto del mundo. Es aquí donde parece posible enfrentar milagros. ¡Y realmente están aquí! En el sureste del país, en la pequeña ciudad de Marysville, se instaló el escultor Bruno Torfs. Comenzó a trabajar en su proyecto a gran escala, el Jardín de Esculturas. Cada composición que creó está llena de vida y significado que recuerda la fugacidad del tiempo, la unidad del hombre con la naturaleza.
Algunas esculturas se hacen tan inusuales que parece que estas son las raíces de un árbol, tan intrincadamente talladas por la naturaleza misma.
El escultor nació en América del Sur, pero viajó mucho desde la infancia. Vio muchas ciudades y pueblos durante su vida, pero una vez, después de haber estado en Australia, decidió quedarse allí. Después de comprar una parcela de tierra con un bosque, comenzó a trabajar en la creación de un parque fabuloso.
Después de seis meses de trabajo continuo, el escultor abrió el parque a los visitantes.
Al principio era un pequeño parque mágico, solo había 15 composiciones escultóricas en ese momento, pero cada una era tan expresiva y atmosférica que con el tiempo este parque se convirtió en un tesoro nacional.
Ahora ya hay alrededor de doscientas esculturas hechas de arcilla cocida.
La base para la realización es a menudo temas de culto o religiosos.
La pequeña ciudad recibe anualmente miles de turistas que vienen a visitar el país de las maravillas. Y para el autor, el mayor placer es cuando su trabajo trae alegría a los demás.
Sin embargo, uno no puede dejar de mencionar que hubo momentos difíciles para el parque y su creador. En 2009, hubo una ola de incendios devastadores en Australia, de los cuales el Parque Wonderland resultó gravemente dañado.
Pero Bruno no abandonó su aventura, se inspiró en el pensamiento de la alegría de las personas que se sumergieron en un cuento de hadas. Gastó mucho dinero en la restauración del jardín de los milagros, y ahora el lugar está nuevamente abierto y recibe invitados, sumergiéndolos en el mundo de los sueños y las leyendas.
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